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Aprender a elevar el rendimiento de tus trabajadores es clave para aumentar la productividad de tu empresa. Trabajar en equipo, a pesar de que se actúe de manera independiente y autónoma, es inevitable en ciertos momentos. Así pues, es importante saber llevarse bien con profesionales que presenten características distintas a las tuyas. Y es que, trabajar con personas que tengan ideas y perspectivas diferentes supone tanto intercambio de conocimientos como expansión de habilidades, lo cual da lugar a un ambiente laboral innovador.
Qué es el trabajo en equipo
El trabajo en equipo se basa en desarrollar cualquier actividad en conjunto, hecho que supone una dinámica muy distinta a la del trabajo individual, pues se funden diferentes pensamientos e ideas que se centran en el mismo resultado. Trabajar en equipo suele facilitar la resolución del problema planteado o acelerar la creación de algo nuevo. No obstante, no se ha de vincular trabajo en equipo con desorganización ya que si hay desorden la formación de consenso y las tomas de decisiones se dificultan. Por ello es importante intentar crear un grupo equilibrado que persiga los mismos objetivos y que se complemente aportando ideas diferentes sobre un mismo tema.
Cómo se trabaja en equipo
Construir un equipo creativo que presente ideas que se complementen no es tarea fácil, pues los conflictos internos suelen darse y se tienen que afrontar. Es crucial que haya armonía, a pesar de las diferencias individuales entre los miembros del equipo, si se quiere generar un ambiente innovador. A continuación te dejo algunas estrategias para aumentar el rendimiento de tu equipo y conseguir así más productividad.
Manejar los conflictos
En cualquier ambiente laboral surgen conflictos por infinitas razones. Para obtener buenos resultados del trabajo en equipo tienes que resolver los conflictos que vayan apareciendo. Este tipo de crisis se tiene que gestionar siempre de forma transparente dejando que cada persona involucrada manifieste su punto de vista. Nunca excluyas a nadie y deja claro que el diálogo tiene que basarse en la complementación de ideas.
Saber convivir y respetar
Además de manejar las diferencias de opiniones o ideas, tienes que saber manejar las diferencias de personalidad ya que es muy difícil que todos los miembros actúen y vean las cosas de la misma forma. Para afrontar estas situaciones se requiere empatía, pues ponerse en el lugar del otro ayuda a entender y respetar diferencias así como también a aceptar la diversidad. Sin pluralidad de saberes el trabajo colaborativo sería inútil.
Tener buena comunicación
En el trabajo en equipo es probable que se den malentendidos por confusiones o palabras erróneas. Tratar de comunicarse bien e intentar interpretar de forma correcta lo que los compañeros pretenden decir es clave, así como lo es también preguntar dudas o pedir explicaciones con más detalle para evitar equivocaciones. El diálogo sincero es la solución a cualquier tipo de malentendido.
Ser proactivo
El esfuerzo individual a favor del beneficio colectivo es uno de los pilares del trabajo en equipo. Cada aportación es importante, por lo que tienes que intentar ir más allá de lo que se espera de ti. A pesar de que haya un líder en el equipo, cada miembro ha de ser proactivo y contribuir tanto en el desarrollo de actividades de manera efectiva como a la anticipación de los problemas.
Saber escuchar
Si no se escucha a cada miembro, el trabajo en equipo no puede funcionar bien. Así como tú puedes participar, también tienes que dejar espacio al resto para que lo haga. Al haber interacción total se fomenta la aparición de múltiples opiniones sobre un tema determinado, lo cual da lugar a la creatividad y la innovación. Un equipo productivo y armónico debe abrirse a la diversidad y actuar así en base a la pluralidad de ideas. Por otro lado, cabe decir que cada persona puede necesitar más o menos tiempo para expresarse, por lo que se debe respetar su participación y su forma de comunicarse.
Conclusión
El trabajo en equipo es uno de los mayores retos de un emprendedor y, tarde o temprano, acaba siendo fundamental en algún momento. Aprender a manejar los conflictos entre los miembros del equipo así como también a estimular la participación y la proactividad de cada integrante son dos puntos clave para conseguir buenos resultados. Así pues, aunque trabajar en equipo te dé pluralidad de ideas, complementación de opiniones y aumente la creatividad, estos beneficios no se pueden alcanzar si no hay compromiso por parte de todos los involucrados.
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